
Yurukill: The Calumniation Games es una obra a la que fácilmente se le puede considerar extraña, pero sobretodo, original. Puede sonar cliché, pero aunque es usual ver a los estudios más experimentales tratar de hacer que sus lanzamientos resalten con frescas mecánicas o sistemas que alteran las fórmulas de algún género, no es tan común ver un proyecto que intente reunir dos escuelas diametralmente opuestas como lo han hecho los desarrolladores de Izanagi Games (World’s End Club) y G. Rev (Ikaruga) al juntar los puzzles y narrativa de una novela visual de misterio con las frenéticas batallas de disparos y naves de los shoot ‘em up / bullet hell como Gradius.
Dicha combinación ocurre en un nuevo universo creado por Homura Kawamoto y Hikaru Muno, autores del manga y novelas ligeras respectivamente de la conocida serie japonesa Kakegurui (famosa por su anime del año 2017) que en esta ocasión dejan de lado el mundo de las apuestas para optar por uno de crímenes, misterio e investigación.
No obstante, esto no significa que este escenario abandona ese lado tan atractivo, ligeramente demente y muy excéntrico que tanto destaca en sus trabajos. Representado en esta ocasión por el siniestro parque conocido como “Yurukill Land”, la multifacética anfitriona Binko y el entrañable cast de prisioneros condenados y ejecutores, el particular estilo de estos creadores brilla en una trama en la que sus protagonistas ponen todo en riesgo en una peligrosa competencia donde la victoria puede cumplir sus más añorados deseos y la derrota significa la muerte.
A través de etapas narrativas, desafios de ingenio y niveles de acción, este título consigue ejecutar exitosamente una de las mezclas más raras que se ha visto en los videojuegos modernos, para dar como resultado una entrega sumamente divertida y memorable para los fanáticos de las buenas historias y la clásica acción de combate aéreo en dos dimensiones.
Bienvenido a Yurukill Land, un parque de diversiones manejado por la infame Yurukill Inc., una empresa con un altísimo nivel de influencia y poder alrededor del mundo entero, pero también un lado oscuro muy tenebroso pero que pocos se atreven a enfrentar. Esta misma compañía ha reclutado a cinco prisioneros de distintas cárceles, todos ellos condenados a largas periodos tras las rejas por crímenes que claman no haber cometido nunca.
Cada prisionero es emparejado con un “Ejecutor”, una persona encargada de acompañarle, pero también de vigilar sus acciones a través del “Yurukill Game”. En esta competencia cada uno de los cinco equipos trata de superar una serie de atracciones con el objetivo de ser el único ganador y obtener el máximo premio. Para los prisioneros, esta recompensa significa la tan añorada libertad, mientras que para los ejecutores, representa una oportunidad única en la vida de pedir que se cumpla su más grande deseo.
RELACIONADO: MIRA EL TRAILER DE HISTORIA DE YURUKILL: THE CALUMNIATION GAMES
Es así como al inicio de la aventura conocemos a los varios grupos participantes. El primero es conocico como los “Mass Murderers” (Los Genocidas) formado por el prisionero Sengoku Shunju, acusado del homicidio de 21 personas, y la joven ejecutora Rina Azami. Acto seguido, tenemos al “Death Dealing Duo” (El Dúo Asesino) formado por los hermanos Futa y Raita Yamada como prisioneros acusados de la muerte de dos ancianos y la adolescente Kagura Kagutsuchi como ejecutora. En tercer lugar están los “Crafty Killers” (Los Ingeniosos Asesinos) con Gentoku Omuro, hijo adoptivo del CEO de Yurukill Inc., como prisionero e Izane Akagerasu, empleada de la misma empresa, como su ejecutora. En cuarta posición están los “Sly Stalkers” (Los Astutos Acosadores) con Hanaka Ichirin, una idol del pop acusada de acabar con la vida de uno de sus fans e intentar matar a otro más, y Keiichi Oka, su seguidor número uno. Finalmente tenemos a los “Peeping Toms” (Los Mirones) formados por los hermanos Barahabara, siendo Benitaro, alias Alan Poe Akechi, el prisionero y Beniko, alias Kristina Kobayashi, la ejecutora asignada; ambos acusados de disturbios públicos.
Estos cinco equipos deben pasar por las pruebas que Binko, la enmascarada anfitriona del concurso, les ponga adelante. Varios de estos obstáculos los obligan a recordar y enfrentar aquellos actos por los que cumplen condena en su día a día, así como la verdadera identidad de sus ejecutores y que relación tienen estos aparentes ciudadanos inocentes con aquel crimen que cambió su vida para siempre.

Sin duda la trama es uno de los factores más desarrollados y atrayentes de la experiencia de jugar Yurukill: The Calumniation Games. Como ya mencioné, el género de novela visual es muy importante aquí y es bien sabido que el apartado narrativo es el núcleo absoluto de las entregas de ese estilo.
Aunque el material promocional, la pantalla principal y la introducción dejan bastante en claro que las verdaderas estrellas son los integrantes del equipo de los “Mass Murderers”, Sengoku y Rina, la campaña, de alrededor de 20 a 25 horas de duración, te da la oportunidad de jugar con cada uno de los cinco equipos participantes (aunque uno de ellos es más un apoyo cómico que un contendiente formalmente hablando) en sus primeros niveles. Gracias a estos escenarios, que conforman poco más de la mitad del “Modo Historia”, todos los personajes reciben su momento de brillar, crecer y desarrollarse frente a los ojos del jugador, al mismo tiempo que los ejecutores de turno revelan sus verdaderas razones para participar en este demente evento.
Y ya que menciono a los ejecutores, descubrir su personalidad y motivos escondidos es casi tan entretenido como ver a los prisioneros temer por su vida, gracias a la gran atmósfera de tensión que se maneja en los momentos clave. Desde un inicio, Binko les brinda a estos aparentes inocentes la habilidad de asesinar a sus compañeros de equipo con tan solo presionar un botón en sus tablets, indicándoles que solo los prisioneros están en riesgo y que Yurukill está “al servicio” de los ejecutores ¿De qué les serviría eliminar a su único aliado si el objetivo es ganar y conseguir su mayor deseo? Pues la explicación es única para cada participante y descubrirlo es muy llamativo e interesante como para spoilearlo aquí.
Esta dramática y tensa relación entre prisionero y ejecutor es la base del primer acto de la campaña, pero la progresión natural de la trama da paso a otra incógnita cerca a sus niveles finales. Una pregunta que se plantea desde el inicio y cuya respuesta, debo admitir, no terminó por convencerme del todo. Mientras que el conflicto personal entre los participantes es intenso, llamativo y los desarrolla con buena profundidad, el misterio de cierre termina por revelarse de forma abrupta y un poco forzada en las últimas horas. Con esto dicho, esto no quita ningún mérito al destacable trabajo realizado formando a este grupo de entrañables personajes y a un final que, en gran parte gracias a sus últimas escenas jugables llenas de acción, se convierte en un momento de triunfo para los héroes y de mucha emoción y satisfacción para el jugador.

Y ya que menciono el gameplay, es el momento de hablar de aquel contraste que hace tan especial a Yurukill: The Calumniation Games. Como dije más arriba, el aspecto jugable presenta dos caras muy distintas una de la otra. En primer lugar está el lado de “Visual Novel” presentado en secciones con mucho contenido narrativo, bastante información y diálogos por leer. Aquí se desarrolla la mayor parte de la campaña y se develan las más grandes sorpresas y momentos más emotivos a través de la clásica presentación que divide a la pantalla entre un cuadro de texto en la zona inferior y retratos de medio cuerpo con rostros ligeramente animados en la mitad superior.
Aquí también encuentras los clásicos “puzzles” para resolver alguno de los desafios de ingenio de Yurukill Land. Los varios acertijos que enfrentas aparecen en distintos puntos de cada nivel en la forma de “retos de lógica”. Algunos de ellos te pueden solicitar resolver un problema matemático, una pregunta capciosa o completar alguna actividad de entretenimiento tradicional como puede ser decodificar un mensaje, superar un tablero de memoria o esos viejos rompecabezas para deslizar piezas en una cuadrícula 3×3 hasta darle la forma correcta. La variedad de tareas a cumplir es bastante amplia y muy pocas veces verás al mismo puzzle repetirse más de una vez. Además, casi todos ellos cuentan con la temática del crimen de turno que estás analizando en cada capítulo, reforzando así no solo la ambientación, sino la información y lore que te sumerge aun más en la historia. Estas etapas iniciales de cada nivel llegan a su cierre con el “Maji-Kill Time” una secuencia de preguntas y respuestas acerca de lo aprendido recientemente y donde un solo error te llevará a una pantalla de Game Over.
Si bien, estos últimos detalles hacen a estas pequeñas pruebas más interesantes de lo normal, debo destacar que tampoco son muy difíciles ni complicadas. Con la excepción de una o dos que encuentras a lo largo de tu campaña, la amplia mayoría se resuelven en cuestión de segundos o un par de minutos. Por otro lado, la solución a varios de ellos requieren atención al detalle provisto en “pistas”, pequeños items que llevas en tu inventario. Esta mecánica funciona muy bien más del 90% de veces, pero tengo que admitir que en dos ocasiones la lógica de la respuesta me pareció muy rebuscada y un tanto ilógica (irónicamente) Por suerte, aun si te equivocas y llegas a un Game Over, basta con volver a intentar desde el checkpoint más cercano, que suele salvarse automáticamente justo antes de cada punto de riesgo.
En general, este lado del gameplay es el más cercano a lo que suele lanzar Izanagi Games y se nota su experiencia y habilidad para manejar hábilmente el género de visual novel con toques de misterio e investigación, contando una historia no solo con texto, sino también a través de las obstáculos que desafían tu ingenio. Las escenas y retos aquí presentados pueden recordar a otros grandes como Danganronpa o la saga Zero Escape, pero con su propia personalidad y encanto gracias a los carismáticos protagonistas antes descritos. Sin embargo, es cuando damos la vuelta a la página que encontramos aquel lado del gameplay que realmente hace único a Yurukill.

Luego de superar cada atracción de Yurukill Land, Binko guia al equipo que estés controlando a una sección subterránea del complejo donde se encuentra el punto de acceso al moderno sistema BR (Brain Reality) creado por la sombría corporación. Esta versión altamente avanzada de la Realidad Virtual permite al sistema interactuar directamente con el cerebro de los participantes y es usado para permitir a los prisioneros enfrentar, literalmente, a los prejuicios de sus ejecutores para convencerlos de su inocencia (al menos temporalmente) a través de un agresivo enfrentamiento de naves y cientos de proyectiles al estilo de clásicos como Gradius u obras modernas como Touhou cortesía de G. Rev Games los desarrolladores de Ikaruga.
Estas secuencias son diametralmente distintas a todo lo antes visto. Aquí tomas el mando de un “Yurukill Fighter” (un avión de combate virtual) piloteado por tu protagonista de turno. Cada uno de ellos tiene atributos distintos como velocidad, poder y manejo, así como la habilidad especial de controlar (de distintas formas) unas orbes flotantes que apoyan al vehículo disparando en distintas direcciones o sirviendo como escudos. La mecánica base aquí es bastante directa: Continua presionando tu botón de disparo y mantente siempre en movimiento para evadir a los cazas enemigos, así como las muchas balas que cruzan la pantalla formando abanicos, olas y otras formas cada vez más difíciles de esquivar. Cabe mencionar también que tu nave se moverá más rápido cuando no esté disparando por lo que saber cuando pasar a la defensiva es vital.
Junto a estos ataques básicos y las orbes de apoyo, tus Fighters cuentan con una barra de energía que se llena al recoger unos fragmentos de números y cristales verdes (similares a las letras de la Matrix) que caen al derribar a cada oponente o hacerle daño a los más grandes. Estas particulas aumentan tu medidor de poder del 0 al 100% y puedes consumirlo en la forma de un “Burst Shot”, un disparo de poder teledirigido, o un “Burst Defensivo” que genera un área de choque alrededor de tu personaje eliminando proyectiles y ganando un breve respiro de invencibilidad. Además, si tienes un medidor por encima del 20%, no morirás al recibir un ataque y simplemente tu barra caerá a 0. Finalmente si consigues alcanzar el 100% puedes invocar tu ataque más poderoso, capaz incluso de reducir gran parte de la vida de un gigantesco boss. Tal como lo lees, en este juego de crimen y misterio, también tendrás que usar avanzados cazas de combate para luchar contra enormes robots y criaturas de pesadilla con increíble poder de fuego.

Para suavizar un poco el contraste entre el lado de novela visual y este lado de acción, Yurukill añade interesantes mecánicas relacionadas a su trama. Por ejemplo, al inicio de cada secuencia de vuelo Binko te muestra un cuestionario de preguntas relacionadas al episodio más reciente y elegir la respuesta correcta te premiará con 5 vidas más para tu lucha hasta alcanzar un máximo de 20, y ten por seguro que las necesitarás en los niveles más avanzados. Por otro lado, existen retos especiales como los Laberintos Mentales que también te obligan a responder correctamente a distintas incógnitas y donde un error te reducirá 3 vidas de forma instantánea. Debo admitir que todo esto suena bastante extraño, pero funciona y es francamente divertido sentir que controlas a Phoenix Wright y al piloto de Ikaruga al mismo tiempo.
Otro gran detalle que sirve para reforzar esa misma emoción y evita separar el argumento de la acción son los muchos diálogos que se desarrollan durante el combate. Es muy común que, tras superar algunas olas de rayos mortales (o incluso a la mitad de una de ellas) los protagonistas hablen y comenten sobre la tensa situación que se libra durante un combate “BR”. Después de todo estas batallas aéreas son representaciones digitales del duelo de dos mentes.
RELACIONADO: MIRA UNO DE LOS PRIMEROS TRAILERS DE YURUKILL: THE CALUMNIATION GAMES
Eso sí, debo recalacar que la dificultad no es para nada subestimable y el nivel “Hell” será todo un reto incluso para los más grandes expertos de este estilo. Por esa razón te recomiendo completar la campaña en Normal, o incluso Easy si te sientes abrumado. Realmente vale la pena que la disfrutes de inicio a fin para luego, si así lo deseas, mejorar tus habilidades de piloto en el Modo Por Puntaje donde compites con los mejores del mundo y consigues los trofeos más difíciles.
En resumen, la inusual combinación de Novela Visual y Shoot ‘Em Up, que en teoría suena tan extraña como el plato de comida más excéntrico que hayas visto, termina por formar una impresionante combinación jugable que logra elevar su historia al intercalar entretenidas secuencias de alta calidad para ambos géneros una tras otra. Yurukill puede captar tu interés con su sobresaliente trama, pero realmente te sumerje en su mundo con el gameplay, ya sea al resolver puzzles o derribar naves espaciales.

Hablando de los aspectos técnicos, así como Yurukill: The Calumniation Games presenta dos tipos de gameplay muy distintos, también presenta dos estilos gráficos contrastantes. Al recorrer cada una de las atracciones del parque de diversiones durante las secuencias de novela visual estás siempre acompañado de hermosos retratos dibujados a mano de medio cuerpo para cada uno de los integrantes del cast que participan en los varios diálogos o narraciones. Estas mismas ilustraciones de alta calidad y detalle cuentan también con sutiles animaciones en su cabello, ojos y boca para expresar convincentemente sus emociones de la mano de la correspondiente actuación de voz.
Los escenarios, aunque no tan impresionantes como los personajes, están formados por elementos planos colocados en un ambiente 3D que los hace parecer como dioramas o maquetas formadas por ilustraciones planas colocadas en distinta profundidad. En general, creo que el acabado artístico de estas secciones más narrativas es realmente muy bueno y puede competir con la mayoría de obras similares en el mercado, aunque tengo que decir que me hubiera gustado ver ilustraciones especiales para los momentos más dramáticos. Por último, también debo resaltar la dirección artística de las interfaces y los menús que capturan efectivamente la excéntrica esencia del mundo que habitan.
En el otro lado de la moneda tenemos el arte de las secuencias de combate sobre aviones. Desafortunadamente, esta sección del apartado gráfico es mucho menos llamativa y hasta la podría considerar solo cumplidora. Esto no quiere decir que se vea mal, pero creo que los básicos modelos 3D, efectos y explosiones de colores no destacan particularmente y se sienten como algo que ya hemos visto en otros ejemplos como R-Type Final 2. Aun así, hay unos pocos elementos atractivos como los gigantes jefes robot que protegen el final de cada nivel y las psicodélicas secuencias donde tu nave y el escenario se ven reducidos a líneas guías (wireframes) de formas geométricas y muchísimos colores de neón.
En segundo lugar, tenemos el audio, representado principalmente por la actuación de voz presente a través de toda la campaña. Si bien tengo que decir que creo que los actores de voz japoneses hacen un excelente trabajo para darle vida a cada uno de los participantes, destacando a la demente Binko, también es una pena que dicho idioma sea la única opción para el audio. Esto lo digo puntualmente porque durante las secciones de combate a veces puedes perderte algunas frases importantes si no conoces el idioma y tu atención está fijada en las balas en lugar de los subtítulos. Por otro lado, aunque no tiene que ver con el audio, tengo que recalcar que no hay opción para texto en español. Considerando la gran cantidad de texto a leer, tienes que asegurarte de estar familiarizado con el inglés, japonés, francés, chino o alemán si deseas disfrutar de Yurukill.
Por último, la banda sonora no es particularmente memorable en la mayoría de sus composiciones, pero hay una canción que es francamente excepcional: El opening titulado “Black Innocence”. Esta tonada no solo se usa para los trailers, sino que también sirve de acompañamiento para los momentos más emocionantes de la campaña, incluyendo el inicio de cada sección de disparos en su versión instrumental y una versión totalmente cantada para la lucha final. Puedes escucharla a continuación directo desde el canal de YouTube de Izanagi Games.
En conclusión, Yurukill: The Calumniation games es un excelente lanzamiento que carga su “rareza” con orgullo como una insignia del valor que sus desarrolladores pusieron al apostar por una idea tan poco común, que afortunadamente logra funcionar muy bien para dar como resultado una experiencia como casi ninguna otra que puedes apreciar por cualquier lado que la mires. Claro está, siempre y cuando seas un jugador que guste de los géneros que aquí se mezclan tan expertamente.
Cuando se anunció que los autores de Kakegurui, tomando el rol de escritores, se habían reunido con Izanagi Games para crear un nuevo juego narrativo, era de esperarse que el argumento fuera la piedra angular de este proyecto, y en ese sentido no decepciona. La trama de los prisioneros obligados a ser parte de un concurso de vida o muerte para ganar una segunda oportunidad puede sonar conocida, en especial con el sub-género “Death Game” ganando cada vez más popularidad; pero el agregado de los ejecutores, el sombrío pero irreverente mundo que los rodea y el factor futurista de la realidad virtual hacen destacar a esta aventura de entre sus competidores.
Sin embargo, al menos en mi opinión, es el gameplay el que realmente convierte a este lanzamiento en una experiencia única. La combinación de un género que suele requerir atención al detalle, cálculos mentales y gran capacidad lectora, como son las novelas visuales de investigación, con otro que exige grandes reflejos y coordinación mano/ojo, como los clásicos combates de naves, parece algo que en teoría no debería funcionar. Esta extraña mezcla parece apuntar a dos grupos muy distintos de jugadores, por lo que uno pensaría que uno u otro lado sería el punto flaco del proyecto; pero sorprendentemente no es así. Ya sea que me encontrase resolviendo puzzles en un cuarto cerrado o derribando enormes robots surcando los cielos, me he divertido mucho y ese entretenimiento ayudó bastante a empujarme hasta un final que, si bien se siente algo brusco, no deja de ser satisfactorio.
No estoy seguro que tantos fanáticos de las novelas visuales gusten de la acción de alta velocidad y precisión de los viejos shoot ‘em up / bullet hell, y la misma duda existe en el sentido contrario. Puede que no sean muchos, pero puedo decir que afortunadamente me cuento entre aquellos que gustan de ambos géneros. Si también es tu caso, eres fanático de las buenas novelas visuales de misterio y te sientes a la altura del reto de pilotear un Yurukill Fighter, entonces no debes dejar que esta pequeña joya pase desapercibida sin ganarse un lugar en tu colección.

Esta reseña fue escrita luego de jugar una copia digital de Yurukill: The Calumniation Games brindada por NIS America. El juego está disponible en PlayStation 4, PlayStation 5 y Nintendo Switch.