La franquicia Sonic siempre ha sido ambiciosa. Desde los tiempos del Dreamcast, la serie siempre ha intentado algo nuevo. No necesariamente con resultados positivos, pero por lo menos con las agallas para experimentar. En ese sentido, Sonic Mania, un regreso a los clásicos de Genesis, fue posiblemente el juego de la franquicia mejor recibido en mucho tiempo. Y, tras el ambicioso Sonic Frontiers, no es de extrañar que el erizo azul haya vuelto a las andadas. Entonces, en una franquicia en la que ha habido de todo, desde viajes en el tiempo hasta hombres-lobo, Sonic Superstars ha sido quizá lo más inesperado: un juego de Sonic que no es ni una revisión de títulos anteriores, pero que se mantiene cerca a sus elementos más básicos.
En Sonic Superstars, el Dr. Eggman se ha propuesto una vez más hacer el mal secuestrando simpáticos animales peludos y encerrándolos en robots. Esta vez, su objetivo son las Northstar Islands y cuenta con la ayuda de Fang el Cazador y una recién llegada llamada Trip, una extraña chica que lleva una voluminosa armadura y a la que no parece interesarle la parte “malvada” de ser malvado. Es por ello que Sonic y sus amigos tienen que formar equipo, derrotar a Robotnik, recuperar las Emerald Chaos y llegar a casa a tiempo.
Sonic Superstars te permite elegir entre los “cuatro grandes” personajes de Sonic: Sonic, Tails, Knuckles y Amy. Sonic es el más rápido y puede hacer un drop-dash, Tails puede volar y Knuckles puede trepar y planear por el aire. Por su lado, Amy puede hacer un doble salto, y su martillo le permite dañar a enemigos que los otros personajes no pueden. Si bien puedes elegir a cualquier personaje, hay ciertas fases que requieren un personaje específico.
Hacia el final, la experiencia acaba pareciéndose bastante a otros juegos de Sonic, en los que puedes jugar con todos los personajes. Sonic es el predeterminado, y casi todos los demás se sienten un poquito mejor que él a cambio de un poco menos de velocidad. Bajo esa perspectiva, podría considerarse a Amy una especie de modo fácil, ya que su doble salto le da ontrol aéreo extra y sus ataques con martillo derriban fácilmente a algunos de los enemigos más molestos. No obstante, estoy seguro de que los speedrunners preferirán a Sonic por su mayor impulso, pero por lo demás, puedes elegir a cualquiera y gozar de bastante velocidad.




El diseño de niveles de Sonic Superstars es similar al de Sonic 3 y más abierto que lineal. Cada fase tiene varias rutas, las más altas tienen menos obstáculos pero suelen requerir más plataformas. Hay varios objetos ocultos, como anillos gigantes que puedes usar para ir a fases especiales y recoger Chaos Emeralds y medallones coleccionables que se pueden usar para comprar piezas personalizadas para el modo Batalla.
En general, el diseño de los niveles es bastante agradable, son enormes y contienen una gran variedad de desafíos. Cada fase es distinta, con mecánicas de juego bastante interesantes. En una de ellas tienes que explorar en la oscuridad, mientras que en otra vas constantemente por encima y por debajo del agua. Incluso hay algunos momentos extraños, como un escenario lleno de frutas gigantes que sirven de escondite, o una secuencia en la que tienes que hacer plataformas mientras llevas a otro personaje a cuestas. De hecho, creo que este es el elmento que más me ha gustado de Sonic Superstars, ya que ayuda a sentirse siempre fresco sin alejarse de lo que lo convierte en un título de Sonic.
La única crítica al diseño de niveles es que es bueno, pero no genial. A veces parece que los escenarios tienen demasiado espacio de relleno o trucos repetidos, lo que puede hacer que los segmentos resulten un poco repetitivos. Lo bueno es que el diseño de los escenarios es mucho más fluido que en otros juegos de Sonic en 2D; no tiene tantos altibajos, así que acaba en un punto medio para mí.
Una de las mayores novedades de Sonic Superstars son los poderes Emerald. En anteriores juegos de Sonic, las Emeralds Chaos eran todo o nada. O las recogías todas y obtenías acceso a las superformas de un personaje, o solo eran joyas brillantes. Sonic Superstars intenta encontrar un término medio dando acceso a los poderes. Cada Emerald que encuentres (a través de anillos dorados ocultos al estilo Sonic 3) tiene ahora un poder especial asociado. Cada poder puede usarse una vez por punto de control, pero se repone automáticamente. Una vez activado, un poder está activo durante un breve periodo de tiempo y puede usarse varias veces durante su periodo activo.




Todos estos poderes son significativos. Avatar te permite llenar la pantalla de clones que dañan instantáneamente a los enemigos en pantalla, Water te permite nadar en el agua convirtiéndote en una forma líquida, Bullet te permite convertirte en una bola de fuego que puede disparar en cualquier dirección, Ivy te permite crear una planta en crecimiento que puedes montar, Vision revela cosas ocultas, Slow ralentiza las cosas y Extra te da un poder exclusivo del personaje con el que juegas. Por ejemplo, Sonic tiene acceso al Homing Attack de Sonic 3D, mientras que Knuckles puede disparar una bola de fuego con sus puños. Si bien la idea es interesante, siento que la implementación de las Emerald Chaos es algo limitado, lo que impide que se sientan como una parte natural del juego. Sonic ya ha usado mecánicas similares anteriormente (los Wisps en Sonic Colors es lo más parecido), pero se integraban de una forma más natural.
Avatar es un botón temporal de “mata todo lo que haya en pantalla” que suena bien en teoría, pero el diseño real de un juego de Sonic hace que le saques relativamente poco partido aparte de las batallas contra jefes. Water es una idea genial, pero su uso es tan limitado que resulta terrible en comparación con Bullet, que te permite saltarte la mayoría de los desafíos de plataformas. La mayoría de los poderes son inútiles o increíblemente potentes, y como los niveles no están diseñados en torno a ellos, no como una parte natural de la jugabilidad. En ese sentido, siento que es genial que los poderes estén disponibles, pero realmente no siento que aporten mucho.
Sonic Superstars también permite opciones multijugador, ya sea en forma de versiones cooperativas del modo historia o de modos Batalla, en los que creas un avatar robot personalizado y compites en varios desafíos, como carreras o recolección de estrellas. El modo multijugador ha existido de alguna forma desde Sonic 2, y es más o menos el mismo que en Superstar. Es un añadido interesante, pero no estoy seguro de que encaje bien en el juego. Los distintos poderes de los personajes no encajan bien en la acción cooperativa, en comparación con algo como Super Mario 3D World o Disney’s Illusion Island, donde todos comparten las mismas habilidades en bruto. Sin embargo, parece una buena opción para momentos familiares.



Visualmente, Sonic Superstars luce correcto con entornos brillantes que realmente resaltan bastante. Las animaciones de los personajes son potentes y aportan personalidad a los personajes no vocales, especialmente al nuevo personaje Trip. La banda sonora merece un elogio especial. Jun Senoe y Tee Lopes vuelven a componer la banda sonora de Superstars y hacen un trabajo increíble. Muchas de las canciones parecen sacadas directamente de la Genesis y, aunque me gustaría que hubiera más temas que no fueran chiptunes, es difícil rechazar tantos temazos. En cuanto a los efectos de sonido, en más de una ocasión sentí que faltaba sonido en las escenas. Por ejemplo, cuando Eggman golpea su Eggmobile con frustración, sólo hay silencio. Es un descuido extraño en un juego que, por lo demás, suena fantástico.
Hacia el final, Sonic Superstars es un juego de Sonic con reminiscencias de los tiempos de Genesis, pero preparado para que lo disfruten los nuevos jugadores. No es en absoluto un juego de Sonic perfecto, debido a algunas elecciones de diseño que podría molestar a algunos, pero aún así es una fantástica revitalización de algunas de las mejores facetas de la franquicia hasta la fecha.

Esta reseña fue escrita luego de jugar una copia digital de Sonic Superstars brindada por SEGA para PlayStation 5.
PUNTOS BUENOS
El arte y los colores son muy bonitos. Superstars goza de toda la jugabilidad clásica. El diseño de niveles es interesante en el sentido de que hay material para explorar. Los habilidades únicas de los personajes es un gran añadido. La música la he disfrutado bastante.PUNTOS MALOS
Los poderes de las Emerald Chaos no son malos, pero no siento que dialoguen del todo ien con la propuesta de juego.CONCLUSIÓN
Sonic Superstars es una fantástica vuelta a la forma de una serie que durante un tiempo perdió su identidad, y que ha encontrado el camino de vuelta al corazón de los fans. Aunque algunas decisiones en el sistema de los poderes Emerald pueden sentirse algo extrañas, al final lo que importa e slo divertido que puede llegar a sentirse y en ese aspecto Superstars está en su tope.