En abril el presidente de Nintendo of America, Reggie Fils-Aime, se retiró para desilusión de sus fans. En su último día en la empresa abrió, por primera vez, una cuenta en Twitter. Ahora, según los comentarios que ha hecho hoy, parece que continuará activamente en la red social para hablar acerca de los videojuegos.
Este fin de semana, dos horribles tiroteos en masa cobraron la vida de casi 30 personas en El Paso, TX y Dayton, OH. Después de la violencia, muchos legisladores republicanos decidieron culpar a los juegos, incluyéndose en las afirmaciones al Presidente de los Estados Unidos, quien pidió la prohibición de lo que él llama “videojuegos horripilantes y espantosos”.
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Internet reaccionó rápidamente, llegando a la defensa de los juegos con un hashtag de moda en Twitter. Ahora Reggie Fils-Aime ha intervenido con su propio mensaje de apoyo. El Tweet, que en el momento de la publicación tiene más de 23.000 retweets, transmite un mensaje directo y apoyado estadísticamente:
When the ill-informed are being critical of the gaming industry and community, this is a very powerful story. The facts are that countries with high per capita gaming revenue have fewer gun-shooting deaths. Except the US, where 4% of the population own 43% of the guns. https://t.co/bKi5D9Y9wc
— Reggie Fils-Aime (@Reggie) August 6, 2019
La cita de Reggie refleja lo que la ESA y Hillary Clinton han señalado: otros países también juegan videojuegos pero no demuestran la misma violencia social. No obstante, la opinión de Reggie tiene un poco de peso extra. Como él dice, muchos de los países que tienen menor violencia armada que los Estados Unidos en realidad tienen mayores ingresos por las ventas de juegos.
Reggie se incorporó a la industria en el 2004, cuando subió al escenario de Nintendo en el E3 y afirmó que, a partir de entonces, la compañía estaría “pateando traseros y creando juegos”. Eso le da 15 años de experiencia viendo crecer la industria. Algunos podrían argumentar que obviamente Reggie defenderá la industria en la que trabajó.
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Pero ahora que Reggie ha seguido su camino adelante, no tiene la responsabilidad ni la obligación de seguir comentando lo que sucede en la industria de los juegos. Antes de llegar a Nintendo, Reggie no trabajaba para una empresa de juegos. En los últimos quince años, desarrolló una pasión genuina por la industria, y esa pasión brilló a través de él. Algo que le proporcionó muchos fans durante su estancia en Nintendo.
Al final, la declaración de Reggie sólo arroja más pruebas sobre los argumentos en defensa de los juegos. Y hace lo que las otras declaraciones ayuden a reenfocar la conversación de una industria que ya no debería tener que defenderse.
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