Como muchos saben, The Witcher nació como una serie de libros escrita por Andrzej Sapkowski, y en poco tiempo logró reconocimiento en su natal Polonia y luego mundial. Años después del primer libro, Sapkowski vendió los derechos de juego de la serie al desarrollador CD Projekt Red por menos de $ 10,000, pensando que el medio de los videojuegos no iba a ninguna parte, y que esto no producirían ninguna ganancia. Pero estaba drásticamente equivocado.CD Projekt Red no solo hizo que The Witcher se convirtiera en una de las franquicias de videojuegos más populares del mundo, sino que llevó la serie de libros a una audiencia global, y ayudó a introducir una adaptación televisiva de Netflix.
Por supuesto, luego de esto, Sapowski lamentaría su decisión y hace poco llevaría a cabo acciones legales para obtener regalías, acciones que probablemente no lleguen a absolutamente nada.
Por otro lado tenemos al autor ruso Dmitry Glukhovsky, creador de la serie Metro 2033, que ha generado su propia, aunque menos popular, serie de videojuegos, Metro. A diferencia de Sapkowski con The Witcher, la serie Metro de 4A Games ha sido bastante rentable para Glukhovsky, quien claramente adoptó un enfoque muy diferente al repartir los derechos del juego. Dicho esto, hablando con el outlet ruso DTF, Glukhovksy reveló su opinión sobre Sapkowksi, y digamos que no es su persona favorita
De acuerdo con Ostrog y su traducción, Glukhovsky reveló que, como jugador de videojuegos, él ve a Sapkowski como “un viejo tonto”. El autor ruso señala que su contraparte polaca “la cagó” y que la razón por la que presentó una demanda contra el CD Projket Red se debe a que su “esposa lo está regañando por las noches”.
Glukhovksy continuó con el asunto, calificó a Sapkowski como “un imbécil ingrato” y señaló que, sin el éxito de los juegos, nunca habría tenido el acuerdo con Netflix. “Es solo un hombre mayor, perdió su oportunidad y, bueno, ¿qué puedes hacer? Lo siento por el hombre”. – sentenció.
Glukhovsky concluyó sobre el asunto al señalar que el autor polaco no debería estar llevando a cabo la demanda, ya que podría perjudicar al proyecto en curso de Netflix, quien, como señala, no le gustan mucho los asuntos legales.
