Adios Dead Rising 5. Un nuevo video reportaje en YouTube documenta la caída del Capcom Vancouver y los problemas de desarrollo detrás del cancelado títuo.
Mientras que los personajes como Resident Evil, Devil May Cry y Street Fighter son más conocidos, el trabajo de Capcom en Dead Rising ha crecido bastante en cuanto a la fanática de culto a lo largo de los años.
Eso ha permitido a los jugadores navegar por una serie de divertidos escenarios mientras matan zombis, salvan a los supervivientes, luchan contra jefes mortales y descubren maravillosas conspiraciones exageradas, la serie se ha convertido en una versión irónica del género zombi.
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Sin embargo, tras el lanzamiento de Dead Rising 4, la serie ha permanecido inactiva desde entonces, y Capcom Vancouver, el equipo detrás de la serie, cerró a principios de 2018.
Trágicamente, los rumores decían que una quinta entrada de la serie Dead Rising fue enlatada junto con el estudio. Sin embargo, parece que los fans están de suerte, ya que el periodista de juegos Liam Robertson ha revelado mucho más sobre lo que sería este potencial Dead Rising 5 si los planes se hubieran llevado a cabo como se esperaba.
Discutiendo los problemas de desarrollo que plagan la potencial secuela en su video de YouTube “How Capcom’s Dead Rising Studio Fell Apart – Game History Secrets”, Robertson describe exactamente lo que era Dead Rising 5 y por qué finalmente se vino abajo.
Según el periodista, el juego comenzó a producirse sólo unos meses después de que comenzara el desarrollo de Dead Rising 4, con un nuevo equipo de talento completamente nuevo detrás del juego.
El título estaba originalmente destinado a ser protagonizado por Chuck Greene, el protagonista de Dead Rising 2, con la narración que se desarrolla en la brecha entre las historias del segundo y tercer juego.
Supuestamente, también habría visto a jugadores capaces de jugar a la hija de Chuck, Katie, como socio cooperativo, con los dos teniendo su propio conjunto de habilidades distintivas y conjuntos de movimientos.
Además, el juego se desarrollaría en la ciudad ficticia de Santa Catrina, México, con Chuck y Katie trabajando con un cártel local para asegurar Zombrex, la droga ficticia de la serie.
Se suponía que iba a ser mucho más colorido que los dos últimos juegos de la serie, funcionando con un nuevo motor y con un combate muy diferente.
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Según Robertson, los problemas surgieron cuando el proyecto cambió de enfoque varias veces, ya que el juego originalmente pretendía parecerse a un título de Ubisoft antes de dar un gran giro en U y buscar más inspiración en Dark Souls.
Parece que a Capcom no le gusstó el gran cambio de dirección, cerrando el estudio y matando el proyecto para siempre.
Dado que los anteriores juegos de Dead Rising se inclinaban hacia encuentros más desafiantes, habría tenido sentido que la franquicia buscara inspiración en lanzamientos como Dark Souls, en un esfuerzo por encontrar lo que hizo funcionar sus primeras iteraciones.
Lamentablemente, parece que los fans nunca llegarán a ver lo que el proyecto podría haber sido.
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