Castlevania Dominus Collection

Desde que Konami comenzó a lanzar colecciones de juegos de Castlevania, los fans han tenido dos preguntas claras: ¿sacarán una colección de los juegos de Castlevania de Nintendo DS? Lo que conlleva a otra pregunta: ¿cómo? Dado que estos juegos utilizaban el formato de pantalla dual o el stylus de alguna manera, llevar estos juegos a hardware moderno no parecía tan simple como aumentar la resolución y agregar estados de guardado, lo cual fue suficiente para sus colecciones anteriores. Felizmente encontraron una solución y así fue que vio la luz Castlevania Dominus Collection, que incluye Castlevania: Dawn of Sorrow, Castlevania: Portrait of Ruin y Castlevania: Order of Ecclesia. Como bonus, la Castlevania Dominus Collection también incluye la versión original del juego de arcade Haunted Castle y un remake moderno de este, Haunted Castle Revisited.

Aunque casi todos los juegos en 2D de Castlevania han sido relanzados en colecciones anteriores, siempre había dudas entre los fans sobre si los juegos de DS recibirían el mismo tratamiento. La relación de aspecto entre las dos pantallas y el uso del stylus y la pantalla táctil no se traduce fácilmente a las plataformas modernas. Aunque todos querían que esta colección se realizara, muchos no estaban seguros de cómo podría llevarse a cabo. La solución al problema de las dos pantallas se puede ver en las capturas de pantalla de esta reseña. La parte izquierda de la pantalla tiene la pantalla principal del juego en la relación de aspecto original, mientras que el lado derecho muestra el mapa y otros datos que estaban en la segunda pantalla. Se tarda unos segundos en acostumbrarse a la visualización, pero al final funciona bien para estos juegos. Además que se adapta perfectamente a las relaciones de aspecto de las pantallas modernas y se ve mucho mejor que simplemente usar la pantalla original de DS con bordes laterales.

La siguiente preocupación con estos juegos es el uso del stylus. Si bien la funcionalidad del stylus se encontraba en los tres juegos de DS, fue más prominente en Dawn of Sorrow. Dawn of Sorrow requería el uso del stylus en la pantalla táctil para destruir bloques y dibujar un sello para derrotar a los jefes. En mi opinión, la implementación del stylus en Dawn of Sorrow rompía el flujo del juego, y me alegra ver que se minimizó en los juegos posteriores. Para cosas como ingresar nombres de jugadores o tratar con esos bloques destructibles, el joystick derecho mueve un cursor y el botón R2 actúa como si lo tocara. Los sellos en las peleas contra jefes ahora son eventos de tiempo rápido donde el jugador ingresa una secuencia de botones en lugar de tener que dibujar el sello. Para quienes no eran fanáticos del juego con el stylus, este enfoque probablemente será visto como una mejora.

La gran atracción de Castlevania Dominus Collection son los tres juegos de DS incluidos. Cada título presenta su propia historia, protagonista y mecánicas distintivas, aunque todos comparten el mismo estilo de juego. Estos juegos siguen el formato instaurado por Castlevania: Symphony of the Night, permitiendo al jugador explorar el castillo de manera no lineal, utilizando nuevos ítems y habilidades especiales para acceder a nuevas áreas.

Castlevania: Dawn of Sorrow es la secuela de Castlevania: Aria of Sorrow. Aquí, el jugador controla nuevamente a Soma Cruz, quien puede dominar las almas de sus enemigos, recolectarlas y equiparlas tras derrotarlos. Algunas almas permiten ataques especiales, como lanzar proyectiles o convertir gatos en armas, mientras que otras ofrecen mejoras pasivas en las estadísticas o habilidades especiales. Aunque Dawn of Sorrow hacía un uso intensivo del stylus, esta característica, aunque interesante en teoría, afectaba el ritmo del juego. En ese sentido, los controles táctiles se han adaptado para que los sellos de alma se mantengan, pero con una integración más natural en el hardware moderno.

Castlevania: Portrait of Ruin está ambientado en la Segunda Guerra Mundial y, al igual que Castlevania Bloodlines, cuenta con dos protagonistas, Jonathan y Charlotte. A diferencia de Bloodlines, el jugador puede controlar a ambos personajes durante el juego, alternando entre ellos o manejando a uno mientras la IA se encarga del otro. Algunas secciones del juego requieren que un personaje se quede quieto mientras el otro realiza acciones, como mover objetos o activar interruptores, y ambos pueden realizar ataques especiales en conjunto contra los secuaces de Drácula. Este enfoque aporta un elemento distintivo a Portrait of Ruin, haciéndolo uno de los juegos más memorables de la serie.

Castlevania: Order of Ecclesia es el juego más desafiante de la colección y, para muchos, el mejor. Además, es más lineal en comparación con los otros dos, especialmente al principio, ya que Shanoa viaja por el campo en su camino hacia el castillo de Drácula. En lugar de un mapa continuo, cada área es una subárea en el mapa que Shanoa puede explorar de manera más tranquila. También hay un pueblo donde se desbloquean tiendas y otras características a medida que Shanoa libera a más aldeanos, una característica que se repitió en Bloodstained: Ritual of the Night. Order of Ecclesia introduce el sistema de glifos, permitiendo a Shanoa equipar armas y habilidades a través de glifos recolectados, ofreciendo una amplia variedad de configuraciones de ataque y ataques especiales.

Es casi doloroso admitirlo como fan de Castlevania, pero Haunted Castle es realmente malo. No solo es una entrega débil en la franquicia, sino que en términos generales es simplemente un mal juego. La única motivación para jugarlo es satisfacer la curiosidad sobre cómo sería un juego arcade de Castlevania de 1988 o para confirmar cuál es el peor juego de la franquicia. Este juego arcade estaba diseñado para consumir monedas, no mediante una dificultad desafiante y emocionante, sino por sus mecánicas de juego deficientes. El protagonista se mueve con torpeza y lentitud, y sus ataques lentos y saltos torpes lo convierten en un blanco fácil para los secuaces de Drácula. En contraste, Haunted Castle Revisited es una de las mayores sorpresas que se han incluido en cualquier colección. La versión arcade ha sido completamente renovada y ahora resulta un verdadero placer jugarlo. Aunque no lo pondría al nivel de los mejores juegos clásicos de Castlevania, es mucho mejor que el juego de arcade original. Haunted Castle Revisited corrige todos los problemas del original, convirtiéndolo en el juego que siempre debió ser. La principal razón para adquirir Castlevania Dominus Collection es por los juegos de DS, pero Haunted Castle Revisited es un excelente complemento y vale mucho la pena jugarlo.

Creo que no es sorpresa saber que las colecciones retro son tan buenas como los juegos que incluyen, y pueden mejorarse con otros factores. Los tres juegos principales son excelentes, y de los dos juegos adicionales, uno de ellos es sólido. En ese sentido, lo que hace que Castlevania Dominus Collection sea tan destacable es el esfuerzo requerido para hacerla funcionar y cómo lo logró con éxito. El hardware único de la DS hacía que esta colección pareciera imposible, pero encontraron una manera de integrar el stylus y la pantalla dual.

Además de los juegos, se espera que las colecciones como esta incluyan alguna característica adicional o mejoras en la calidad de vida. En ese sentido, espera encontrar amplias galerías de arte y bibliotecas de música para que los jugadores disfruten a su ritmo. Aunque Haunted Castle es malo, su música es buena. También hay múltiples estados de guardado. Además, al igual que otras colecciones de Castlevania, incluye una función de rebobinado que permite retroceder unos segundos si el jugador comete un error.

Castlevania Dominus Collection no solo destaca como una excelente colección de juegos, sino también como una notable proeza técnica al adaptar títulos diseñados para el hardware de Nintendo DS a plataformas modernas. Aunque Haunted Castle Revisited no es el atractivo principal de esta colección, resulta ser una sorprendente revelación. Para los fans de Castlevania, los juegos de DS son imprescindibles, y M2 se ha esforzado al máximo para asegurar que estos títulos mantengan su excepcional calidad en el hardware actual. Las compilaciones retro son habituales hoy en día, pero debido a la calidad de los juegos incluidos y al esfuerzo puesto en garantizar su buen funcionamiento, esta colección se destaca entre las mejores disponibles.

Esta reseña fue escrita luego de jugar una copia digital de Castlevania Dominus Collection brindada por Konami para PC.